«Me siento tan frio y abandonado. Como si ya nada tuviese razón de ser, mi alma está vacía sin ti a mi lado, mi corazón roto no logra entender, en mi mente navegan tus palabras, recuerdo cada cosa que dijiste ayer. Ya no quiero excusas, ya no quiero un «no eres tú». Dime la verdad ¿me quisiste? Sé que no hubiese podido amar por ambos pero yo estaba dispuesto a esforzarme más, a luchar. ¡Maldita sea! Fui tan inexperto, tan ingenuo, quería algo verdadero pero tú no querías hacerlo, tan joven para pensar que el amor se encuentra en una sonrisa. ¿Qué hice mal? Sólo quería algo de amor, pero para ti no fue nada mi corazón. Ahora estoy en el fuego, pagando por un deseo. No puedo respirar, ¿por qué es tan cruel el amar?»
Por: Edson Andrés Londoño